Que la pandemia ha cambiado una gran cantidad de pautas de comportamiento que hasta su irrupción teníamos interiorizadas no es ningún secreto para nadie. De manera progresiva, cada vez han sido más los sectores que se han visto en la obligación de tener que digitalizar sus servicios para poder continuar llevando a cabo su actividad con independencia de las restricciones en términos de aforo o de movilidad, además de los confinamientos a los que nos hemos tenido que enfrentar de manera habitual durante los últimos años.
Las tiendas de sexo llevaban muchos años con una fuerte presencia en las principales ciudades de nuestro país. Pero no ha sido hasta la explosión del comercio electrónico cuando la sociedad ha logrado verlas como uno de los escenarios idílicos para explorar los beneficios del sexo, tanto en solitario como en compañía, a partir de los diferentes productos existentes: juguetes eróticos, cosmética erótica como la que podemos encontrar en pinkcabaret.es/cosmetica-erotica/, o cualquier otra opción que puedes ver si haces clic aquí.
Un 36% de mujeres afirman haber probado los juguetes eróticos
Los datos que devuelve Statista son suficientes para conocer la penetración de este tipo de productos en nuestro día a día. Según el portal especializado, el 36% de las mujeres españolas afirma haber probado en algún momento los juguetes eróticos. En el caso de los hombres, la cifra desciende hasta el 31%. Sin embargo, ese mismo porcentaje afirma que estaría interesado en poder comenzar a interactuar con ellos en algún momento. Demostrando una gran predisposición al respecto.
Encontramos diferentes atributos que nos permiten entender este crecimiento. Entre ellos, destacan los siguientes:
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Una mayor discreción: Uno de los grandes enemigos que toda la industria de productos eróticos ha tenido que superar es lo que tiene relación con la discreción de sus productos. Históricamente, en el imaginario social siempre ha existido una importante barrera de entrada para poder acceder a los espacios físicos de esta industria. Gracias al comercio electrónico, esta barrera se ha superado por completo. Mejorando la percepción de discreción instaurada.
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Calidad: Actualmente encontramos una gran cantidad de artículos de calidad que nos permiten mejorar nuestra experiencia. Las principales marcas del sector han experimentado una notable evolución durante los últimos años al respecto.
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Garantía: A partir del 1 de enero de 2022, todos los productos que compremos en este tipo de espacios cuentan con tres años de garantía. Un tiempo más que suficiente para cubrir todas las necesidades con las que contamos.
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Catálogo: El volumen del catálogo es uno de los elementos principales que destacan frente a las tiendas físicas. Ofreciendo un mayor número de posibilidades al usuario final para comprar sus productos favoritos.
Mucho más que juguetes eróticos
Pese a que siempre se relaciona a las tiendas de juguetes eróticos con los diferentes productos más específicos, la realidad es que actualmente contemplan una gran cantidad de opciones capaces de cubrir las necesidades de un amplio abanico de usuarios. Entre ellos, una de las categorías que mayor crecimiento han experimentado ha sido la de la cosmética erótica. Contando con una gran cantidad de soluciones que nos permiten elevar nuestro disfrute a un nivel superior.
Las tiendas especializadas en productos eróticos han experimentado una importante evolución durante los últimos años. Gracias a la amplia variedad de opciones que existen actualmente en el mercado, unido a los cambios en los patrones de comportamiento por parte de la sociedad general, actualmente nos encontramos inmersos en una de las épocas doradas de este tipo de industrias.